sábado, 19 de noviembre de 2011

Capítulo 7

VII


Traición






Sus manos estaban empapadas de sangre. No comprendía lo que estaba pasando, solo buscaban la libertad, un lugar para refugiarse y un modo de escapatoria de este infierno, pero Eric comprendió que el infierno acababa de empezar. Aquellos hombres armados con el emblema de BWO tomaron los cuerpos del suelo. Eric chillo. Se negaba a que se llevaran los cuerpos de sus amigos, de su familia... pero no podía hacer nada. Elisabeth le tenía inmovilizado con una arma puesta en su nuca, «- ¿acaso todo estaba preparado? -». El único tren que estaba estacionado en la vía encendió motores, y de él descendió el hombre a quien había entregado su vida Elisabeth. Llamado El Señor. Uno de los tres líderes de BWO y del Proyecto Paraíso.

- No se preocupe doctora, hiciste lo que debías por tu bien... -

- Lo se Señor... -

- Y todo gracias a usted doctora, nuestro proyecto dará frutos - El Señor le acaricio la mejilla mientras le sonreía - Suba al tren con el chico, y los que han quedado con vida serán cazados... - después ladeo la vista hacia Eric - Has tenido suerte muchacho -

Eric desvió la mirada con la de él, y con sus ojos azules y empapados de lágrimas, contemplo el machete de su hermano en el suelo. Definitivamente el infierno para Eric acababa de empezar, en cambio para sus compañeros, parte de ellos, había acabado en un baño de sangre.



Una hora antes



La estación de Liberty City estaba a casi dos minutos, la entrada a la libertad lo tenían en la palma de la mano, pero antes debían de superar a los pocos caminantes que habían merodeando. El autobús escolar quedo definitivamente aparcado en la ancha acera, y Marcos con su compañía descendieron como en una manada. Marcos sostenía, quizás, la última arma de Liberty City con tres únicas balas para los casi diez caminantes de la zona. Amanda llevaba una pequeña bolsa con apenas medicamentos suficientes, pero estando tan cerca de la libertad no le serviría de mucho. El resto sostenían un grueso palo de escoba como Alicia, incluso una barra de hierro que sostenía Anna firmemente. Elisabeth llevaba a Eric de la mano, mientras que Alexander les defendería con su machete en esta corta trayectoria.

- Todo acabara bien Elisabeth... -

- Alexander.... -

- ¡Venga en marcha!, son unos pocos, será fácil - Marcos alzo su arma . ¡Adelante! -

Los caminantes no duraron en sobresaltar sobre ellos cuando vieron que corrían hacia la Estación. Parte de ellos se centraron en Marcos y Anna, que iban en cabeza de los demás. Anna asesto un fuerte golpe con la barra de hierro contra la frente de un caminante, desatando su furia por el recuerdo de Leo y Barny. El caminante cayo al suelo, y Anna se echó sobre él, golpeando desesperadamente el cráneo y manchándose la ropa de la sangre que expulsaba. De sus ojos caían lágrimas. Estaba sufriendo tanto como el caminante, pero al final el cascarón que la cubría se rompió. Ahora era libre de cualquier miedo y tomo la valentía que debió tener momentos atrás en el puente colgante. Alicia se acerco a ella y le dio una palmada en el hombro.

- Todo ha pasado ya... ahorra fuerzas - le sonrió - ¿Vamos? - Alicia le extendió su mano y la ayudo a levantarse - 

Otros dos caminantes salieron de entre los vehículos arrastrando sus pies. Uno de ellos, donde parte de su cara quedo desfigurada por las llamas, corrió velozmente hacia Amanda sin parar. Nuevamente se escucho uno de los tres disparos que le quedaban a Marcos. Su cabeza exploto en miles de pedazos. El otro caminante se desvió del camino al escuchar el disparo, y fue a asestar a Marcos. No tuvo la mera oportunidad de rozarle con sus grisáceas manos, ya que un segundo disparo resonó explotando nuevamente otra cabeza.

- ¡Ya quedan muy pocos chicos! - grito Marcos - ¡A por todas! -

Corrieron en abanico por la larga calle de la Estación, que estaba cubierta de grandes farolas y matorrales, por donde los caminantes salían e iban hacia ellos. Todos corrieron al mismo ritmo, y ninguno se quedaba atrás. Alexander acelero sus pasos con grandes zancadas para asestar fuertes cortes sobre los tres caminantes que bloqueaban el camino. Sus cabezas cayeron rodando como pelotas desinfladas, y sus cuerpos caían al suelo, retorciéndose sobre ellos mismos. 

- Estos eran los últimos... - mascullo Alexander limpiando la hoja de su machete - Padre, el camino está ya libre... estamos a salvo - sonrió -

- Entonces sigamos hacia adelante -

El grupo de sobrevivientes atravesó el gran arco de piedra que rodeaba la entrada principal de la Estación. Aún se podía ver sangre fresca en los pilares y en la pared, y algunas maletas derribadas en el suelo y entreabiertas. Marcos fue el primero en entrar en el vestíbulo de la Estación. Todo estaba muy callado, y el suministro de energía estaba cortado por los cables sueltos que colgaban del techo. Marcos se acercó a la barandilla que tenía enfrente, y bajo sus pies contempló el único tren que quedaba estacionado en la estación. El tren era de un tono plateado, y las ventanillas estaban tintadas de negro con el emblema de BWO.

- ¿Así que los trenes pertenecen a BWO?... que extraño.... -

- ¿Hay algún tren Marcos? - pregunto Alicia -

- Hay uno, suficiente para todos nosotros... -

- No creo - mascullo una voz desconocida -

De repente, cada uno de los sobrevivientes fue apuntado por un láser rojo en el pecho y en la sien. La voz ordenó que tirasen sus armas y se recopilasen todos juntos. Ninguno comprendía por qué motivo les apuntaban desde las penumbras de la Estación, y más ordenando que tirasen sus armas. Poco a poco la voz del hombre se descubrió. Desde el otro extremo de la estación apareció un hombre apoyado en un bastón. Era joven, treinta años por ahí. Tenía la cabeza rapada, y una cicatriz que le cubría desde la frente hasta la nuez de la garganta. Sus ojos estaban ocultos por unas gafas oscuras, y su larga túnica imponía a los demás. Del cinturón le colgaba una especie de machete, pero más mejorada que la de Alexander. La deslizo sobre la túnica y señaló al grupo, concretamente a Elisabeth y a Eric.

- Cuanto tiempo doctora, me alegro de verte con vida -

- ¿Le conoces? - pregunto Anna -

- ¡Claro que me conoce! - farfullo el hombre - Querida doctora... lo has hecho muy bien -

- Gracias. Era mi trabajo... - confesó Elisabeth - Éste es Eric, uno de los sujetos Señor -

- ¿Uno de los sujetos?, ¿De que va esto? - salto Amanda alterada -

El Señor ordenó el alto el fuego para Elisabeth y Eric. Ambos se encaminaron hacia él, pero Eric no paraba de mirar hacia atrás. Elisabeth le empujaba. De su mochila extrajo la pistola que tenía, y la poso en la nuca del muchacho. Amanda saltó, pero Marcos la detuvo con sus brazos, « - Tranquila cariño... - ». El Señor, que era así como le llamaban, acarició la suave piel de Eric y asintió.

- Suelta a Eric... - le pidió Alexander - Es un niño, déjale... -

- Con nosotros estará a salvo ¿cierto Doctora? - Elisabeth asintió sin poder mirarles - No como vosotros... -

- ¿Que quieres decir? - se apresuró Alicia - Elisabeth...¿por qué haces esto? -

- El golpe de Alexander me recordó quien era realmente... - confesó Elisabeth - Y esta soy yo, miembro de BWO que sentenciará vuestra muerte... ¡Disparen! -

Alicia lo comprendió al vuelo. Los rifles recargaron con nuevas balas, y esta vez más de cuatro mirillas apuntaban a cada uno de ellos. Amanda se aferró al robusto cuerpo de su marido, mientras que Alexander agarraba la mano de Alicia y Anna, que ambas cerraron los ojos a la espera del disparo de los de BWO. Eric quiso gritar, pero el miedo de la pistola en su nuca le tenía paralizado. De repente, justo cuando iba a dar la orden de disparar, un pequeño objeto metálico entró rodando desde la entrada hasta el centro del vestíbulo, donde los sobrevivientes estaban agrupados.

- ¡Escapen de ahí! - grito una voz del exterior -

La esfera metálica expulsó humo blanco para cegar la vista de los francotiradores, pero aún así decidieron disparar. Los gritos se escuchaban en medio del humo, incluso lamentos de lloros. No se veía nada, excepto sangre por el suelo que corría por las baldosas. Sangre. Cantidad de sangre que llegaron a los pies de Elisabeth y Eric. El muchacho se agachó y contempló la sangre, que poco a poco fue acompañadas de lágrimas del pequeño muchacho. Cuando el humo se disipó por completo, Eric gritó al ver los cuerpos que habían caído. El muchacho se separó de Elisabeth y corrió hacia el gran charco de sangre; se arrodilló y abrazó el cadáver de su madre. Acribillada por varios disparos, igual que su padre y Alicia. El cuerpo de su padre estaba a pocos centímetros de Amanda, donde su mano agarraba la de ella y la de la joven Alicia. Elisabeth contempló aquella horrible escena, y no tuvo escrúpulos de alejar a Eric de los cuerpos y apuntándole nuevamente en su nuca.



*  *  *  *  *  *  *  *  *  *  *  * 



- ¡Rápido, por aquí! -

Alexander corría desesperadamente junto a Anna detrás de aquel muchacho que les ayudó a salir de la estación con vida, pero varios soldados de la BWO salieron tras ellos. Atajaron a través de los vehículos hasta acceder a un oscuro callejón. Allí varios cadáveres infectados estaban caídos en el suelo con la sien destrozada. El muchacho que iba encabeza de ellos atajó por otra esquina, dando esquinazo a los soldados. Llegaron a un callejón sin salida, en donde el chico les guió por unas escaleras de incendios, llevándoles hacia una de las ventanas del edificio. Allí, éste cerró la ventana rápidamente y se empotró contra la pared por el cansancio. Miró de reojo a Alexander y Anna, que estaban atemorizados por el asedio de antes.

- Solo vosotros dos... - maldijo - Aún así os sacaré de Liberty City ahora mismo. BWO os estará buscando  -

- ¿Han muerto... todos? - pregunto Anna,  sin poder hablar entre lágrimas -

- Si - asintió el muchacho fríamente -

- ¿Y mi hermano pequeño...? ¿Le harán algo? -

- No - contestó - Por ahora... - el muchacho se incorporó y les indicó a los dos el camino hacia unas escaleras - Lo necesitan vivo hasta que no le resulte útil tu hermano a la organización -

Subieron las escaleras, aún con más preguntas que al principio del terror.

- ¿Por que querrían BWO  a un niño...?, no lo comprendo... -

- Experimento... - contestó nuevamente -

- Entonces es cierto .... - farfullo Alexander - BWO ha sido el culpable de esta infección por Liberty City ¿cierto? -

- Así es... pero esto acaba de comenzar - el muchacho abrió una puerta y accedieron a la alta azotea, en donde había un pequeño helicóptero - Subid - les pidió -

- ¿Adonde iremos?, no quiero dejar a mi hermano con esa gente... -

- Tranquilo muchacho, tu hermano está en manos seguras por ahora... - le dijo - Trabajé en la BWO junto a la doctora Elisabeth... -

- Entonces puedes contarnos todo lo ocurrido... ¿no? - le pidió Anna -

- Es una larga historia... -

- Tenemos tiempo - sentenció Alex- Comienza por el principio... -

- El Proyecto Paraíso.... -

Anna y Alexander subieron en el helicóptero junto a aquel muchacho. El piloto puso todo en marcha y poco a poco comenzaron a elevarse de la azotea. Desde esas vistas, Anna veía como uno de los trenes de la Estación acababa de salir. BWO escapaba con los últimos sobrevivientes de Liberty City hacia un lugar seguro... o tal vez no.

6 comentarios:

  1. Ay O.O
    ¡Elisabeth! ¡Menos mal que Alexander no ha muerto! Me hubiese dado una penaza T^T pobre Eric..ver a su madre y padre muertos.
    Sigo sin entender por qué actúa Elisabeth así, estoy estresada. Pero tal y como nos has dejado el capítulo hoy, parece que lo sabremos en el siguiente capítulo.

    Creo que Alex querrá venganza contra ella...y no sé cómo fue capaz de ordenar el fuego y dejar que Alexander muriese después de ese beso que se dieron en el ascensor ¬.¬
    Me he peleado yo con ella xD

    Espero pronto el último capítulo de la temporada jeje :)

    Besitos<3

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  2. Haber haber haber (comentario algo fuera de lo normal)
    Elizabeth es una furcia, guarra , puta, zorra, perra, asquerosa, engendro mal parido, fea, hija de zombis y demás Grrr me voy a poner azul como siga pensando en ESA (no se merece que diga su nombre ¬¬)
    Después Eric un experimento? Los hijos de **** ¡Quien le hizo eso! Mi pobre eric! Con lo monoso que era y ahora sera experimentos de viejos verdes (va se me pira la cabeza)
    Es injusto que nos dejes así, aun quiero saber mas, MAS! ¿Entiendes?
    Y Alex que la de una buena a la muy zorra de Elizabeth (y eso que me cayo bien, asquerosa)
    No se lo perdono en mi vida! (A no ser que acabe suicidándose para perdonarles, ahí la perdono si no... ¡JAMAS!)
    Uff, amanda me cayo bien, me dio penita su muerte... Al padre me cayo mal desde siempre xD
    Alicia,... era un bicho raro para mi jajaja
    Bueno, un buen capitulo, espero el siguiente :)

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  3. Después del comentario de Saritah me da miedo decir nada no vaya ser que diga algo que no la guste y venga a por mí xD
    Muy buen capítulo, Eric me recuerda a mí mismo xDD el niño experimento...
    Molaría que Elisabeth estuviese haciendo un papel para que los de la BWO creyesen que seguía con ellos y así poder cuidar de Eric junto a Mike. Espero el próximo capítulo.

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  5. Saritah, ha dejado clara su conducta (me da miedito T^T)
    Elizabeth es una furcia, una vendida y una... no se me ocurren muchos más calificativos para esa "doctora", estoy con Saritah...
    Aunque lo que más me interesa es saber quien es el desconocido.
    De todas formas, creo que Elizabeth también busca venganza por lo de Mike, igual se está haciendo la hija de puta y lo único que quiere es cargarse al tal Mike...
    Empieza a aclarar o Saritah te sacará los sesos y se los comerá. xD

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  6. Era inevitable que se cargasen a los padres siempre pasa igual, ahora Alex querrá venganza cosa que me parece muy bien aunque mejor la actitud de Elizabeth como toda una zorra científica. Me imagino que el darle las pastillas a Eric es para que su cuerpo asimile el virus y no lo rechaze como debió pasar en los otros individuos más adultos.

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